PROCRASTINAR

En esta era de la productividad, Procrastinar es la resistencia.

El mes de julio viene con aroma a olvidar la encerrona y a volcarse en las bondades del verano. La productividad sigue su curso, pero lo contraresta esa sensación que te arrastra hacia la hedónico y el olvido divino. Hay ganas de verano, de mar y cielos abiertos. Hay sed de no pensar en el más allá y disfrutar del presente y esta sumatoria sensacional hace que se aletarguen las tareas, las cosas pendientes y tendamos a la procrastinación.

Pero, PROCRASTINAR, lo hemos hecho siempre. Viene de serie. Básicamente viene a decir :

Posponer o aplazar tareas, deberes y responsabilidades por otras actividades que nos resultan más gratificantes pero que son irrelevantes.

Y aunque esté mal visto, y no demos muestra de ello, pienso que si sucede es por algo. Por eso he compuesto esta canción rumbera y con mucha saeta casera. Una canción que proclama el Derecho a Procrastinar, a dejarse llevar por lo nimio y sin sentido, por las tareas irrelevantes y a ahondar en nosotros mismos para saber porqué hacemos esto.

Disfrútenla!

Ya saben, todo el la vida, en su justa medida. 😉